miércoles, 24 de noviembre de 2010

Para los papás: Encuentro de integración, recreación y formación verano 2010/2011 (Programación)


Encuentro de Recreación, Integración y Formación Verano 2010/11


Coordinadores:

• Juan Pablo Oliveri (Profesor de kung fu / estudiante de profesorado en educación inicial)
• Maria Lucia Pereyra (Asistente de kung fu/ Estudiante de profesorado en educación inicial)

Horario: de 11:00 a 20:00 horas.

Día: 4 de Diciembre

Lugar: escuela Wu Sheng Tao - Avellaneda 62

Programación:

11.00 hs- Presentación del encuentro.

11.30 hs - Preparación del Esquema de fin de año

13.30 hs- Almuerzo Grupal

14.00 hs- Actividad audiovisual 1: Orígenes del Kung Fu Templo Shaolin
Mediante la proyección del documental del Templo Sholin los alumnos se dividirán en dos grupos por edades (de 4 a 8 y de 9 a 12 años) ambos grupos desarrollarán una reflexión de lo aprendido en dicho documental. El primer grupo de forma artística mediante el dibujo y el segundo de forma escrita mediante laminas.

15:00 hs- Juegos Sociomotores 1


• El juego de la silla integrada

Quitamos una silla de manera tal que falte un lugar para sentarse. Comienza la música, los participantes empiezan a moverse alrededor de las sillas. Cuando la música se detiene, los niños deberán acomodarse de manera tal que ninguno quede sin silla. El objetivo es que los niños se ayuden para quedar sentados y de esta manera cooperar y respetar al otro.

• Adivinar el compañero seleccionado

Un niño quedará apartado del grupo para no escuchar nada de lo que hablarán sus compañeros. El coordinador señala a uno de los niños, todos visualizan de quien se trata, cuales son sus características y como esta vestido. Se acerca el niño apartado, y deberá realizar a sus compañeros preguntas que sólo puedan ser contestadas mediante el sí o el no. Con las respuestas recibidas, ese niño deberá descubrir quién es el compañero elegido por el coordinador.

• Adivina de que palabra se trata (exclusivo grupo de 9 a 12 años)

Se colocan todos los niños en una fila. Se les dice que levanten la mano derecha e imaginen que tienen una tiza en sus manos y que la espalda del compañero es un pizarrón. Comienza el que este al final de la fila, este deberá escribir un valor en la espalda del compañero que tiene adelante. Cuando este termine deberá escribir en su compañero de adelante la palabra que entendió y así sucesivamente hasta llegar al compañero del principio de la fila. Este le dirá al compañero último de la fila la palabra que él haya entendido que le escribieron en su espalda. La palabra puede llegar bien o mal entendida al final.

• El bote (exclusivo grupo de 4 a 8 años)

Se forman grupos de dos personas y se pone música de fondo. Cada grupo debe imaginar que está en un bote. Entonces, el coordinador dará órdenes que se deberán cumplir. Por ej. : “Remen, vamos que hay tormenta!!!”, y todos deberán remar en su bote imaginario, haciendo movimiento con los brazos. Y así a lo largo del viaje el coordinador puede ir inventando distintas ordenes a ser cumplidas.

16.00hs- Merienda y descanso

17.00hs- Charla del Maestro Shifu Walter Mercuri sobre moralidad social y protocolo del arte marcial

17.45- Búsqueda del tesoro

18.45- Proyección de la película Kung fu panda.

Mediante esta proyección se trabajará los valores de igualdad, autosuperación y aceptación a la diversidad. Los alumnos se dividirán en dos grupos por edades (de 4 a 8 y de 9 a 12 años) ambos esarrollarán una reflexión de lo aprendido en dicha película. El primer grupo de forma artística mediante el dibujo y el segundo de forma escrita mediante laminas.

20.30hs- cierre de la actividad

Para los papás: Encuentro de integración, recreación y formación verano 2010/2011.


Encuentro de Recreación, Integración y Formación Verano 2010/11


Coordinadores:

• Juan Pablo Oliveri (Profesor de kung fu / estudiante de profesorado en educación inicial)
• Maria Lucia Pereyra (Asistente de kung fu/ Estudiante de profesorado en educación inicial)


Señores padres:

Les informamos a través del siguiente comunicado, que en estas vacaciones como complemento de las clases infantiles, se estará realizando una actividad especial la cual constará de tres instancias, la primera a realizarse el día 4 de Diciembre desde las 11hs hasta las 20.30hs en la escuela Wu Sheng Tao Avellaneda 62 y con su continuación en Enero y Febrero con fecha y lugar a confirmar. Estas tendrán un costo de $40, $60, $80, respectivamente en el orden dado, cuyo cierre en el mes de Febrero será con un campamento. La inscripción para este primer encuentro, se llevará a cabo a partir del Miércoles 24 de Noviembre hasta el Miércoles 31 de Noviembre. Pudiendo hacer una inscripción individual a esta primer actividad o en conjunto ( a los 3 encuentros ) con un respectivo descuento.

Los requisitos de la inscripción serán:

• Abonar la tasa de inscripción antes de la fecha limite.
• Adjuntar ficha de inscripción a esta actividad (la cual se encuentra en este mismo folleto)

Los objetivos de esta actividad serán:

• Unificar el grupo de alumnos como un principio fundamental de familia Shaolin. Los profesores son la cabeza de dicha familia marcial (como padres y hermanos mayores) cada uno de los alumnos (hermanos menores) deberán respetar y aprender el significado de dicha fraternidad y respetarla, como así también poner su granito de arena para que dicha unión se lleve a cabo.

• Que los alumnos aprendan valores útiles (solidaridad, compañerismo, amistad, amor, respeto, esfuerzo, igualdad, perseverancia, humildad, etc.) tanto para su vida marcial como cotidiana.

• Que los alumnos comprendan y hagan propios las tres virtudes que componen el kung fu:

1. Paciencia: Ser paciente en todos los sentidos.

2. Perseverancia: Ser perseverante hasta el final, seguirlo intentando, no rendirse.

3. Humildad: Siempre conservar la humildad, ya que todos somos iguales y nadie tiene derecho a sentirse superior a nadie.

• Que los alumnos comprendan los pilares fundamentales que nos constituyen como escuela, asi como también su origen, protocolo y moralidad


Dichos objetivos, se trabajaran mediante los juegos sociomotores (juegos con reglas). A partir de estos, los niños fomentaran la solidaridad, la aceptación del par como un compañero no como un oponente, la inclusión y la integración grupal. También se pretende que comprendan al cuerpo como un objeto de vinculación directa con el otro, como las acciones motrices expresivas de sensaciones, sentimientos, emociones, ideas, etc. Esto se complementará con diferentes charlas, actividades audiovisuales y artísticas.


“los pequeños, al jugar, bosquejan sus futuras participaciones en el mundo de los adultos: ingresan a la cultura, a los valores y a los posibles roles sociales que ocuparan” Vigotzky (1896-1934)



En este primer encuentro los temas y actividades a desarrollar serán:

• Preparación de esquema de fin de año como eje integrador grupal
• Actividad audiovisual sobre los orígenes del kung fu y proyección de la película Kung fu Panda con reflexión sobre la misma.
• Actividades Lúdicas mediante juego sociomotores profundizando en la integración, reconocimiento del otro y la no discriminación.
• Charla del Maestro Shifu Walter Mercuri (Presidente de la Asociación de intercambio cultural, social y deportivo entre China y Argentina y director de la escuela Wu Sheng Tao) sobre moralidad social y protocolo.



Es necesario acudir a esta primera actividad con:

• Comida para compartir
• Cubiertos, plato y vaso.


¡Los esperamos a todos!

Un cordial saludo.


Shifu Walter Mercuri
Sihing Juan Pablo Oliveri
María Lucia Pereyra



Más información:

• Facebook: Kungfutaichi Zarate.

Mi experiencia personal como profe: Campamentos y encuentros de integración, formación y recreación infantil ( vídeos)

Aqui les dejo dos videos recopilatorios de los encuentros y campamentos realizados entre el año pasado y Marzo de este año.

¡¡Espero que les guste!!




Mi experiencia personal como profe: Campamentos y encuentros de integración, formación y recreación infantil.








¡ Hola a todos!, ¿Cómo están?

Bueno, hoy comenzare a compartir con ustedes mis experiencias diarias de enseñanza desde la educación no formal ( kung fu y campamentos/encuentros recreativos infantiles).
Para arrancar y tomando en consideración que dentro de solo 2 semanas, tengo el honor y la alegría de volver a coordinar los encuentros de verano de la escuela Wu Sheng Tao, voy a compartirles fotos, fundamentos y videos sobre lo que fue y serán los campamentos y encuentros de integración, recreación y formación, donde lo lúdico, la amistad y las ganas de ser mejor persona, tienen lugar como principal enseñanza =)


Campamentos y encuentros de integración, formación y recreación infantil:

Coordinadores:
• Juan Pablo Oliveri ( Profesor de kung fu / Estudiante de profesorado en educación inicial)
• Maria Lucia Pereyra ( Asistente de kung fu/ Estudiante de profesorado en educación inicial)

Tomando como iniciativa un pilar fundamental en la vida del practicante de kung fu, la fraternidad, se desarrollan los encuentros y campamentos de integración para los alumnos infantiles desde los 4 hasta los 12 años inclusive.
La niñez es una etapa de suma importancia en la vida del individuo, donde cualquier tipo de enseñanza de cualquier índole repercutirá durante las restantes etapas. Por eso enseñar al niño valores de igualdad, solidaridad, cooperación, serán fundamentales para que en el transcurso de su vida aprenda a aceptar las diferencias ajenas, tanto físicas, ideológicas, políticas, religiosas, etc. Y lograr una valorización de la sociedad, transformándola en un espacio más justo e igualitario para todos.

“los pequeños, al jugar, bosquejan sus futuras participaciones en el mundo de los adultos: ingresan a la cultura, a los valores y a los posibles roles sociales que ocuparan” Vigotzky (1896-1934)

Mediante los juegos sociomotores (juegos con reglas) desarrollado en los encuentros y campamentos, los niños fomentaran la solidaridad, la aceptación del par como un compañero no como un oponente, la inclusión y la integración grupal. También se pretende que comprendan al cuerpo como un objeto de vinculación directa con el otro, como las acciones motrices expresivas de sensaciones, sentimientos, emociones, ideas, etc.
También se plantea lograr una integración del niño al medio ambiente, su ubicación y desplazamiento en los mismos, su relación lúdica con elementos naturales (tierra, aire y fuego) y el desarrollo de juegos sociomotores cooperativos, en contacto con elementos naturales y el fomentar un disfrute estético de la naturaleza.

lunes, 22 de noviembre de 2010

Los deportes en la primera infancia.



Durante la primera infancia los niños disfrutan de todas aquellas actividades que impliquen movimiento porque con ellas estimulan sus destrezas físicas y a la vez desarrollan sus habilidades mentales, ya que a través del movimiento también se introducen diferentes nociones que favorecen su aprendizaje.

Los deportes son un ejercicio físico, que no sólo favorece el aspecto motor e intelectual, sino que también desarrolla el área emocional tanto a nivel personal como interpersonal. Los deportes sugeridos para practicarlos durante la primera infancia son los siguientes:

NATACIÓN
Se recomienda iniciar esta actividad a partir de los 3 meses de edad, cuando el bebé presenta un sistema inmunológico más fuerte. El tiempo que se le debe dedicar es entre 30 a 45 minutos de acuerdo a la edad, de 2 a 3 veces a la semana será suficiente como inicio a este deporte y la presencia de los padres es fundamental.

GIMNASIA
Su práctica se puede iniciar a los 3 años sólo bajo la supervisión de un especialista quien sugerirá los ejercicios adecuadas a la edad del niño. Se aconseja realizarla por lo menos dos veces a la semana por un periodo de 30 minutos por tratarse de un deporte de habilidades progresivas. Es recomendada tanto para niñas como para niños.

ARTES MARCIALES
Hay muchas artes marciales para elegir, tenemos el kung fu, tae kwon do, el Judo, entre otros. Todos ellas pueden iniciarse el a partir de los 3 años debido a que implica un mayor control del equilibrio y de sus impulsos. De igual forma que la gimnasia debe estar a cargo de un especialista en artes marciales.

BENEFICIOS DE LOS DEPORTES
A través de los de los deportes los niños:

Adquieren disciplina.
Desarrollan su atención y concentración.
Aprenden sobre el respeto y la perseverancia.
Son capaces de trabajar en equipo.
Incrementan su autoestima.
Siguen reglas.
Los deportes en la etapa de la primera infancia se inician a través de juegos, los cuales introducen poco a poco ejercicios cada vez más complejos previos que se realizarán en el futuro como parte de la práctica real de cada deporte. La idea es que el niño disfrute con lo que hace, de ser posible que sea él quien decida el deporte que desea realizar.

Posiblemente será necesario que experimente con diferentes deportes antes de decidir cuál es el que le gusta más, pero será lo mejor porque de esa manera se sentirá seguro con lo que hace, a pesar de ello se le debe apoyar en todo momento y enseñarle a que no siempre se gana, no crearse falsas expectativas que en vez de favorecer la autoestima del niño terminen bajándosela.

Es posible que al inicio le cueste al niño adaptarse a las exigencias que forman parte de cualquier deporte o seguir el ritmo de uno de ellos, pero es entonces cuando el papel de los padres se convierte en la clave para lograr estos propósitos, su apoyo y seguridad que le brinden al niño serán determinantes.

Los deportes en la infancia.



Los niños disfrutan de toda actividad que involucre movimiento, porque es a través del movimiento que ellos se relacionan con el mundo que los rodea. Podrán descubrir, explorar y manipular los objetos de su entorno para así desarrollar su inteligencia de manera progresiva, porque al conocer el mundo por sí mismos estarán aprendiendo de forma significativa lo que los hará capaces de transformar sus conocimientos en ideas.

El deporte desarrolla en los niños tanto el aspecto físico, emocional y mental. Su enseñanza variará de acuerdo a la edad a la que se dirija, en la etapa preescolar se denominará Psicomotricidad, en la etapa escolar Educación Física y se denominará deporte propiamente dicho al ingresar a la adolescencia. Estos cambios en su nombre se debe a que en cada rango de edad, el deporte trabaja objetivos diferentes, por lo tanto tenemos que:

1. La Psicomotricidad (2 a 5 años): tiene como objetivo estimular la percepción sensorial, la coordinación motriz y el sentido rítmico, así como ejercitar la agilidad y flexibilidad del cuerpo.
2. La Educación Física (6 a 12 años): el objetivo es mantener el bienestar de la salud, así como desarrollar el dominio y el control del equilibrio, también ayuda en la adquisición y/o perfeccionamiento de los movimientos automáticos.
3. El deporte (13 años a más): su objetivo es favorecer la socialización, desarrollar el sentido de compañerismo, estimular el desarrollo personal, conseguir el desarrollo de la fuerza física y de la resistencia.

Sin embargo, deporte debe inculcarse desde la primera infancia, de esta manera el niño irá incorporando a su vida cotidiana la realización de alguna práctica deportiva, lo que más adelante se convertirá en un hábito que le permitirá llevar una vida sana. El deporte a elegir deberá ser aquel que a él le guste más, si bien son los padres quienes lo motivarán a elegir uno de ellos, es el niño quien finalmente decidirá.

La práctica deportiva ofrece al niño muchos beneficios que lo ayudarán en diferentes aspectos de su vida, aquí algunos de ellos:

• Fomenta el seguimiento de instrucciones.
• Incrementa su autoestima
• Ayuda a controlar los impulsos.
• Propicia las relaciones sociales.
• Crea valores como el respeto y el compañerismo.
• Desarrolla las habilidades motoras.
• Satisface la necesidad de movimiento.
• Crea hábitos de higiene y cuidado personal.

Es posible que al inicio le cueste al niño adaptarse a las exigencias que forman parte de cualquier deporte o seguir el ritmo de uno de ellos, pero es entonces cuando el papel de los padres se convierte en la clave para lograr estos propósitos, su apoyo y seguridad que le brinden al niño serán determinantes.

No existe una edad exacta en la que se deba iniciar la práctica de un deporte, sin embargo se recomienda que desde pequeños se empiece a estimular el desarrollo de sus habilidades motrices, lo cual les permitirá lograr el control y coordinación de sus movimientos, facilitando así la práctica de algún deporte en el futuro.

Equilibrio.



Es la capacidad de orientar correctamente el cuerpo en el espacio (adquirir una postura adecuada) estando en movimiento o en reposo.

¿Qué es necesario para desarrollar el equilibrio?

Es importante lograr que el niño logre un adecuado conocimiento de su cuerpo (esquema corporal) y de las nociones espaciales, las cuales se iniciarán en relación al propio cuerpo, seguidamente en relación a los objetos, finalmente reconociendo y representándolas gráficamente.

¿Cuáles son los tipos de equilibrio?
Estático: Capacidad de mantener la posición del cuerpo estando en reposo, ya sea echado, sentado, parado u otros.
Dinámico: Capacidad de mantener la posición del cuerpo estando en movimiento (caminando, corriendo, bailando, etc).
Reequilibrio: Capacidad de recuperar la posición inicial del cuerpo después de realizar movimientos en el aire (saltar).
Equilibrio de Objetos: Capacidad de manejar o equilibrar objetos estáticos (cubos, conos, naipes, entre otros) o móviles (bicicleta, patines, etc).
¿Con qué sistemas se vincula el equilibrio?
S. Laberíntico: Capacidad de mantener la posición del cuerpo estando en reposo, ya sea echado, sentado, parado u otros.
S. de Sensaciones Placenteras: Capacidad de mantener la posición del cuerpo estando en movimiento (caminando, corriendo, bailando, etc).
S. Kinestésico: Capacidad de recuperar la posición inicial del cuerpo después de realizar movimientos en el aire (saltar).
S. de Sensaciones Visuales: Capacidad de manejar o equilibrar objetos estáticos (cubos, conos, naipes, entre otros) o móviles (bicicleta, patines, etc).
¿Qué es el vértigo?

Es una alteración del equilibrio que se presenta como una falsa sensación de giro o desplazamiento de la persona u objetos, conocido también como mareo.

Tanto el vértigo como los trastornos del equilibrio, siendo la otitis media o la migraña los más conocidos, alteran el adecuado proceso de adquisición del equilibrio.

Afectando la construcción del esquema corporal y dificulta la correcta estructuración espacio-temporal.

Consejos para mejorar el equilibrio:


Trabajar los reflejos de equilibración.
Adaptar diferentes posiciones, disminuyendo la base de sustentación (espacio de apoyo): pararse con los pies juntos, de puntillas, con un pie.
Usar diferentes superficies de apoyo: pueden ser estáticos (una cuerda, un cubo, etc.) o móviles (un balancín, patines, etc).
Realizar reequilibrios: armar torres con cubos, conos, naipes, etc.
Llevar objetos en las manos de un punto a otro.
Caminar con una bolsa de arena en la cabeza.
Caminar sobre elementos con altura: bancas, muros, etc

Estructuración espacial.


Al hablar de Estructuración Espacial es importante diferenciar las nociones que se mencionan a continuación:
Orientación Espacial: es la capacidad que tiene el niño para mantener la constante localización de su propio cuerpo, en relación de los objetos con el espacio y de los objetos consigo mismo.
Estructuración Espacial: es la capacidad del niño para establecer una relación entre un todo y sus elementos (parte-todo) Ej. Llantas, ventanas, timón, espejo=auto.
Organización Espacial: es la manera como el niño dispone los elementos en el espacio, en el tiempo o en ambos a la vez.
Es importante saber que cuando el niño empieza a estructurar el espacio, lo hace sin separar las naciones antes mencionadas. Por el contrario, conforme el niño va tomando conciencia del espacio (se orienta) irá orientando sus movimientos a un objetivo determinado (estructura y organiza) de acuerdo a sus deseos y necesidades.

La estructuración del espacio se da a partir de las experiencias que el niño tenga en relación a su propio cuerpo, por tratarse de un ser netamente egocéntrico y personal, es de esta manera que parte de los sentidos cumplen una gran labor en este propósito.
La visión: nos ofrece datos e información sobre la superficie, también propiedades como el tamaño, la forma, la inclinación, poder reflectante, etc.
La Audición: nos ofrece datos e información sobre los sonidos que se producen al encontrarse en una posición o de los sonidos característicos de un espacio.
El Tacto (Kinestesia): nos ofrece datos e información sobre nuestro cuerpo en relación a los objetos que nos rodean (postura, desplazamiento).

CONSEJOS PARA DESARROLLAR LA ESTRUCTURACIÓN ESPACIAL

O-4 meses
Echado boca arriba sobre una base cómoda y segura:
Mover la cabeza del bebé de un lado a otro suavemente.
Echarlo boca arriba y boca abajo.
Flexionar y estirar sus piernas.
Juntar sus manos frente a él y separarlas hasta que toquen la base.
5-9 meses
Sentado con apoyo o sólo en un accesorio adecuado:
Presentar su juguete favorito por diferentes lados de su cuerpo para que lo mire mientras mueve la cabeza (pies, cabeza u hombros).
Colocar objetos familiares a cada lado del bebé y pedirle que “le dé” el que se le indica (biberón, muñeco, pelota, etc), entonces estirará el brazo hacia el lado donde se encuentra el objeto.
Con un rodillo de gateo:
Colocar al bebé boca abajo sobre el rodillo y moverlo suavemente hacia adelante y atrás.
Pasar el rodillo sobre el bebé de abajo (pies) hacia arriba (cabeza).
10-12 meses
Colocar al bebé dentro de un aro y entregarle pelotas para que las coloque adentro y afuera, con la guía del adulto.
Pasar por un túnel de gateo y jugar adentro y afuera.
Subir y bajar una escalera con ayuda del adulto.
1-2años
Caminar de un punto a otro llevando algo liviano en la mano.
Ubicar objetos en el espacio.
Gatear y caminar en diferentes direcciones.
3-5años
Imitar acciones con ambas manos: saludar, comer, pintar, peinarse (primero con una mano y luego con la otra).
Colocarse frente al niño con un objeto motivador para él y moverlo en distintas direcciones para que las imite agachándose, parándose, caminando, etc.
Dibujar en el suelo un cuadrado o un círculo y jugar “mar-tierra” saltando dentro y fuera de él.
Armar rompecabezas.
Proporcionarle una hoja de papel y un lápiz para realizar trazos en distintas direcciones.

La lateralidad.



La lateralidad es el predominio funcional de un lado del cuerpo humano sobre el otro, determinado por la supremacía que un hemisferio cerebral ejerce sobre el otro.

La lateralización es el proceso por el que se desarrolla la lateralidad y es importante para el aprendizaje de la lecto-escritura y la completa madurez del lenguaje, la enseñanza de la p, d, b, q, exige el dominio de la lateralidad; si el niño no tiene conciencia de su lado

derecho o izquierdo jamás podrá proyectar al exterior su lateralidad, y se le dificultará la diferencia e identificación de estas letras. Consideremos además que la lectura y escritura son procesos que se cumplen de izquierda a derecha.

El dominar la lateralidad en el niño lo ayudará mucho a ubicarse con respecto a otros objetos. El no hacerlo podría repercutir en las dificultades de aprendizaje de algunas materias. Por ejemplo en el caso de las matemáticas se sabe que para sumar y restar varias cantidades se empieza de derecha a izquierda y si no ha trabajado su lateralidad le será difícil ubicarse frente al papel.

La lateralidad se consolida en la etapa escolar. Entre los 2 y 5 años observamos que las manos se utilizan para peinarse, asearse en el baño, poner un clavo, repartir un naipe, decir adiós, cruzar los brazos y manos, en estos dos casos la mano dominante va sobre la otra. En la edad escolar el niño debe haber alcanzado su lateralización y en función de su mano, pie, ojo y oído.

PARA IDENTIFICAR LA LATERALIDAD

Para conocer la dominancia de la mano podemos pedir al niño/a que realice las siguientes actividades:

Dar cuerda un reloj.
Utilizar tijeras y escribir.
Para la dominancia de pie: saltar en un solo pie, patear la pelota.
Dominancia de ojo: mirar un agujero, telescopio.
Dominancia de oído: escuchar el tic-tac del reloj.

Analizaremos si se realizaron todas las actividades con miembros u órganos del lado derecho o izquierdo, entonces podemos saber si el niño es de dominancia definida. Si alternó derecha con izquierda se dirá que tiene “dominancia cruzada”.

LOGRANDO LA LATERALIDAD

Para desarrollar la lateralidad se puede pedir al niño/a que ejecute lo siguiente:
Identificar la mitad derecha e izquierda en su propio cuerpo, en el de su compañero y en su imagen frente a un espejo.
Manipular, con su mano derecha, la mitad derecha de su cuerpo, iniciando en la cabeza, ojos, oreja, cuello y tronco.
Llevar diariamente una cinta de color en la muñeca de la mano derecha.
Señalar en su compañero, puesto de espaldas, partes de su lado derecho e izquierdo, esta misma actividad se realizará con el compañero puesto en frente.
Frente a un espejo grande y dividido en dos partes iguales con cinta adhesiva, señalar su lado derecho e izquierdo.
Hacer movimientos oculares de izquierda a derecha.
Ejercicios unilaterales: con la mano derecha topar su pie derecho.
Ejercicios simultáneos: con su mano izquierda topar su ojo derecho.
Ejercicios con el brazo izquierdo y derecho: arriba, lateral, derecha.
Lectura de carteles de imágenes: el niño debe identificar los dibujos del cartel, siempre de izquierda a derecha, esta misma actividad puede realizarse con colores.
Dictado de dibujos: la maestra pedirá dibujar figuras geométricas, controlando que el niño realice esto de izquierda a derecha.
Trazar de líneas horizontales, verticales y con cambios de dirección.
Hacer dibujos simultáneos: utilizando dos hojas de papel el niño hará círculos simultáneos en las dos hojas y con las dos manos.
Esta serie de ejercicios son pautas que para el maestro o padre de familia realice en el período preescolar, pero mucho juega la creatividad para encontrar otras alternativas. También se puede hacer uso de juegos y juguetes destinados a desarrollar la lateralidad de manera muy divertida como el set manos y pies.

Esquema corporal.



El esquema corporal es la imagen corporal o representación de cada quien tiene de su propio cuerpo, sea en un estado de reposo o en movimiento.

Según los especialistas, el desarrollo del esquema corporal tiene todo un proceso, depende de la maduración neurológica como también de las experiencias que el niño tenga. Alcanza su pleno desarrollo hasta los 11 o 12 años.
El esquema corporal es producto de un desarrollo progresivo ontogenético y a partir de las siguientes sensaciones:

a) Interoceptivas, (viscerales).
b) Exteroceptivas, fundamentales logradas por la vista y el tacto.
c) Propioceptivas, que nos vienen de los músculos, tendones y articulaciones, y nos
informan sobre la contracción o relajación del cuerpo. (Percepciones de posición y tono muscular).

A lo largo de su evolución psicomotriz, la imagen que el niño se forma de su propio cuerpo se elabora a partir de múltiples informaciones sensoriales de orden interno y externo que este percibe.

Desde el punto de vista evolutivo, primero se dan las sensaciones interoceptivas, la sensibilidad del tubo digestivo y la actividad bucal a partir del nacimiento. A partir de la alimentación y de las funciones excretorias, el niño va experimentando vivencias acerca de su propio cuerpo.

En un segundo momento, los niños experimentan sensaciones de origen cutáneo, es decir a partir de la piel o el tacto, esto dará paso a las sensaciones exteroceptivas, pues descubrirá sus manos como parte de sí mismo y como nexo entre el mundo exterior y su mundo interno. Las manos no sólo son parte de su cuerpo sino instrumentos de exploración. Posteriormente irá descubriendo otras partes de su cuerpo, como sus pies y poco a poco los irá incorporando a su esquema corporal.

A medida que el niño desarrolle destrezas motoras, sea capaz de caminar, desplazarse y adoptar posturas más complejas irá recibiendo información de las diferentes posiciones que adopta e irá tomando conciencia de que ese cuerpo le pertenece. A los tres años, el niño ya tomará conciencia de que su manos, pies, tronco y empezará a manejarse como un todo, irá descubriendo su imagen total.

La organización del esquema corporal es el punto de partida de numerosas posibilidades de acción y juega un papel de suma importancia en el desarrollo de los niños.

Etapas de elaboración del esquema corporal (Pierre Vayer)

Primera etapa: Del nacimiento a los dos años (Periodo maternal)

Empiezan a enderezar y mover la cabeza.
Enderezan a continuación el tronco.
Llegan a la posición sentado con el apoyo primero y luego sin apoyo.
La individualización y el uso de los miembros los llevan progresivamente a la reptación y luego el gateo.
El uso de los miembros le permite la fuerza muscular y el control del equilibrio, esto a su vez le permite:
El enderezamiento hasta la postura erecta.
El equilibrio y posición de pie con ayuda y luego sin ella.
La marcha.
Las primeras coordinaciones globales asociadas a la prensión
Segunda etapa: De los dos a los cinco años

A través de la acción, la prensión se hace cada vez más precisa, asociándose una locomoción cada vez más coordinada.
La motricidad y la cinestesia (sensación por el cual se percibe el movimiento muscular, posición de nuestros miembros) permiten al niño el conocimiento y la utilización cada vez más precisa de su cuerpo entero.
La relación con el adulto es siempre un factor esencial de esta evolución que permite al niño desprenderse del mundo exterior y reconocerse como un individuo autónomo.
Tercera etapa: De los cinco a los siete años (Periodo de transición)

El desarrollo de las posibilidades del control muscular y el control respiratorio.
La afirmación definitiva de la lateralidad (predominio de uno de los lados de nuestro cuerpo).
El conocimiento de la derecha y la izquierda.
La independencia de los brazos con relación al cuerpo.
Cuarta etapa: De los siete a los once-doce años (elaboración definitiva del esquema corporal)

Gracias a que el niño toma conciencia de las diversas partes del cuerpo y el control del movimiento se desarrolla:
La posibilidad de relajamiento global o segmentario (de su totalidad o de ciertas partes del cuerpo).
La independencia de los brazos y tronco con relación al tronco.
La independencia de la derecha con relación a la izquierda.
La independencia funcional de diversos segmentos y elementos corporales.
La transposición del conocimiento de sí al conocimiento de los demás.
A partir de esta etapa, el niño ya habrá conquistado su autonomía. A medida que toma conciencia de las partes de su cuerpo y de su totalidad, será capaz de imaginarse o de hacer una imagen mental de los movimientos que realiza con su cuerpo, esto permitirá planear sus acciones antes de realizarlas.

Psicomotricidad.



Según Berruazo (1995) la psicomotricidad es un enfoque de la intervención educativa o terapéutica cuyo objetivo es el desarrollo de las posibilidades motrices, expresivas y creativas a partir del cuerpo, lo que le lleva a centrar su actividad e interés en el movimiento y el acto, incluyendo todo lo que se deriva de ello: disfunciones, patologías, estimulación, aprendizaje, etc.

La psicomotricidad en los niños se utiliza de manera cotidiana, los niños la aplican corriendo, saltando, jugando con la pelota. Se pueden aplicar diversos juegos orientados a desarrollar la coordinación, el equilibrio y la orientación del niño, mediante estos juegos los niños podrán desarrollar, entre otras áreas, nociones espaciales y de lateralidad como arriba-abajo, derecha-izquierda, delante-atrás. En síntesis, podemos decir que la psicomotricidad considera al movimiento como medio de expresión, de comunicación y de relación del ser humano con los demás, desempeña un papel importante en el desarrollo armónico de la personalidad, puesto que el niño no solo desarrolla sus habilidades motoras; la psicomotricidad le permite integrar las interacciones a nivel de pensamiento, emociones y su socialización.

Importancias y beneficios de la psicomotricidad.

En los primeros años de vida, la Psicomotricidad juega un papel muy importante, porque influye valiosamente en el desarrollo intelectual, afectivo y social del niño favoreciendo la relación con su entorno y tomando en cuenta las diferencias individuales, necesidades e intereses de los niños y las niñas.

A nivel motor, le permitirá al niño dominar su movimiento corporal.

A nivel cognitivo, permite la mejora de la memoria, la atención y concentración y la creatividad del niño.

A nivel social y afectivo, permitirá a los niños conocer y afrontar sus miedos y relacionarse con los demás.

Areas de la psicomotricidad.

Las áreas de la Psicomotricidad son:
Esquema Corporal
Lateralidad
Equilibrio
Espacio
Tiempo-ritmo
motricidad gruesa.
motricidad fina.
Esquema Corporal: Es el conocimiento y la relación mental que la persona tiene de su propio cuerpo.

El desarrollo de esta área permite que los niños se identifiquen con su propio cuerpo, que se expresen a través de él, que lo utilicen como medio de contacto, sirviendo como base para el desarrollo de otras áreas y el aprendizaje de nociones como adelante-atrás, adentro-afuera, arriba-abajo ya que están referidas a su propio cuerpo.

Lateralidad: Es el predominio funcional de un lado del cuerpo, determinado por la supremacía de un hemisferio cerebral. Mediante esta área, el niño estará desarrollando las nociones de derecha e izquierda tomando como referencia su propio cuerpo y fortalcerá la ubicación como base para el proceso de lectoescritura. Es importante que el niño defina su lateralidad de manera espontánea y nunca forzada.

Equilibrio: Es considerado como la capacidad de mantener la estabilidad mientras se realizan diversas actividades motrices. Esta área se desarrolla a través de una ordenada relación entre el esquema corporal y el mundo exterior.

Estructuración espacial: Esta área comprende la capacidad que tiene el niño para mantener la constante localización del propio cuerpo, tanto en función de la posición de los objetos en el espacio como para colocar esos objetos en función de su propia posición, comprende también la habilidad para organizar y disponer los elementos en el espacio, en el tiempo o en ambos a la vez. Las dificultades en esta área se pueden expresar a través de la escritura o la confusión entre letras.

Tiempo y Ritmo: Las nociones de tiempo y de ritmo se elaboran a través de movimientos que implican cierto orden temporal, se pueden desarrollar nociones temporales como: rápido, lento; orientación temporal como: antes-después y la estructuración temporal que se relaciona mucho con el espacio, es decir la conciencia de los movimientos, ejemplo: cruzar un espacio al ritmo de una pandereta, según lo indique el sonido.

Motricidad: Está referida al control que el niño es capaz de ejercer sobre su propio cuerpo. La motricidad se divide en gruesa y fina, así tenemos:

a. Motricidad gruesa: Está referida a la coordinación de movimientos amplios, como: rodar, saltar, caminar, correr, bailar, etc.

b. Motricidad fina: Implica movimientos de mayor precisión que son requeridos especialmente en tareas donde se utilizan de manera simultanea el ojo, mano, dedos como por ejemplo: rasgar, cortar, pintar, colorear, enhebrar, escribir, etc).

Problemas de aptitudes y de rendimiento.



Problemas de atención:


La atención es un factor muy importante para que la información llegue hasta el cerebro y, posteriormente, quede retenida.La atención es selectiva, y no se puede prolongar indefinidamente. Es preferible mantenerla en un plazo corto de tiempo y volver sobre ella tras un período de descanso.

Para superar las dificultades sobre la atención es conveniente:

- dedicar al sueño un número de horas suficientes, según la edad del niño y sus necesidades particulares.

- cuidar la respiración: algo que suele pasar desapercibido, pero que es muy necesario para que el oxígeno llegue a la sangre con facilidad, contribuyendo así a disminuir el cansancio.

- una alimentación equilibrada y completa: no realizar tareas de estudio despúes de una comida abundante.

- motivar e interesar al niño para realizar la tarea propuesta.

- dejar, entre tarea y tarea, un tiempo de relajación y/o descarga.

Problemas de memoria:

Para que se ponga en marcha el mecanismo de la memoria, la persona se ha de proponer recordar la información recibida. A partir de aquí, seleccionará de entre la información, la relacionará con otros datos ya adquiridos y la integrará.

Un ambiente relajado y tranquilo ayudará a "fijar" la información.

Encontrar la causa de dichos problemas, incidiendo sobre ella, así como realizando ejercicios específicos que impliquen dicha aptitud serán los pasos a seguir.

Problemas de razonamiento verbal:

Los niños con problemas en este área, ven afectada tanto la comprensión como la fluidez de su lenguaje.

Se hará conveniente trabajar estos aspectos con un psicólogo infantil, a través de tareas que impliquen estas aptitudes, así como el ir fomentando el gusto por la lectura y todo aquello que, de alguna manera, pueda ir mejorando su capacidad lingüística.

Problemas de razonamiento abstracto:

Plantear y resolver problemas ayudará a desarrollar esta aptitud.

Problemas de razonamiento numérico:

Los problemas en esta aptitud suelen deberse a una falta de atención y de concentración, y a dificultades en temas propiamente de cálculo (de automatizar el mecanismo de las operaciones: suma, resta,...).

Problemas de sobrecarga:

El descansar poco, permanecer demasiado tiempo seguido frente a una misma tarea y el realizar un exceso de actividades extraescolares constituyen un círculo vicioso que acaba repercutiendo negativamente en el éxito escolar del niño.

Transtornos del aprendizaje escolar



Transtornos psicopedagógicos.

Cuando un niño, al finalizar el curso escolar, no tiene asumidos los objetivos pedagógicos propuestos en su inicio y pasa al curso siguiente se le crearán problemas de aprendizaje más complejos de los que ya venía sufriendo, sobre todo en aquellas áreas de mayor continuidad (matemáticas, lenguaje,...).

Requerirá asistencia individual y puntual que le permitan ir recuperando ese déficit.

Otros transtornos:


En algún caso, otros trastornos como la depresión infantil pueden estar detrás de los problemas de aprendizaje. Un niño que hasta ese momento siempre había salido exitoso en sus aprendizajes, y que de repente se muestra triste, inhibido,...podría hacernos sospechar de ello.

En estos casos, el trastorno de aprendizaje será tratado desde la raíz, desde la causa profunda, por un especialista de la Psicología infantil. Los problemas de aprendizaje serían en estos casos síntomas o consecuencias de un trastorno mayor y no el eje de dicho trastorno.

Transtornos especificos del desarrollo: Retraso psicomotriz.



Un retraso en cualquiera de las áreas psicomotrices puede repercutir negativamente en el resultado de los aprendizajes escolares. Será necesario realizar una exploración profunda de cada uno de los aspectos, para saber sobre qué puntos trabajar.

En la base de todos los aprendizajes está la Psicomotricidad; deficiencias o alteraciones en ésta influyen indiscutiblemente. Cuanto antes se detecten y antes se proceda a trabajar sobre ella, mejores serán los resultados.

Transtornos especificos del desarrollo: Discalculia.



Es un trastorno específico del cálculo aritmético.

Suele aparecer asociado a la dislexia, la disgrafía y a trastornos de la atención.

Los problemas más frecuentes que se suelen observar son:

- confundir los números

- invertirlos

- escribir los números en espejo

- y los problemas derivados de todo esto.

El tratamiento va enfocado a encontrar la causa, y aplicar lo antes posible una atención individualizada y específica sobre los conceptos aritméticos, por parte de un psicólogo infantil. Es conveniente intervenir cuanto antes para que no aumente el problema con los siguientes aprendizajes.

Transtornos especificos del desarrollo: Disgrafía.



Es un trastorno específico de la escritura: el niño presenta un nivel de escritura significativamente inferior al esperado por su edad y curso escolar, y ello influye negativamente en sus aprendizajes escolares

Las problemas más frecuentes que se suelen obsevar son:

- inversión de sílabas

- omisión de letras

- escribir letras en espejo

- escritura continuada o con separaciones incorrectas

Va íntimamente relacionado con la lectura.

Todo ello, le supone un sobreesfuerzo de atención y muy pocos resultados exitosos.

El tratamiento consistiría en detectar la causa lo antes posible , y realizar una atención individualizada y específica sobre cada caso en cuestión, por parte de un especialista en Psicología infantil. Es conveniente intervenir cuanto antes para que no aumente el rpoblema con los siguientes aprendizajes.

Transtornos especificos del desarrollo: Dislexia.



En los niños con dislexia hay una gran dificultad por distinguir las letras o grupos de letras, así como su orden y ritmo dentro de una palabra y/o una frase.

Muestran gran dificultad para realizar con éxito el aprendizaje de la lectura, presentando un nivel de lectura significativamente inferior al esperado por la edad o el curso escolar.

La dislexia afecta al resto de aprendizajes. Todo el comportamiento del niño disléxico se verá afectado por su problema de comunicación. Realizar cualquier tarea, le supone un "derroche de energía". Se mueve con inseguridad, le cuesta coger un lápiz, situarse frente a un papel en blanco,...

Básicamente, las causas giran alrededor de:

- una mala lateralización

- desorientación espacio-temporal

- problemas de percepción

- alteraciones en su psicomotricidad (esquema corporal, equilibrio,...)

- trastornos de tipo afectivo

y, NO se deberá, a ningún defecto visual, auditivo o neurológico.

La mala lateralización le dificultará emplazar y orientar las letras correctamente; ello provocará la realización de inversiones, omisiones,... confusiones de éstas que le impedirán alcanzar el nivel de lectura deseable.
El método elegido para el aprendizaje de la lectura influirá en la aparición de este trastorno. Lo ideal y más completo será utilizar un método mixto. No hay métodos buenos ni malos, cualquier método es bueno si se aplica adecuadamente.

Generalmente, va asociado a la disgrafía.

Es muy importante detectar dicho trastorno precozmente (entre la Educación Infantil y los dos primeros cursos del Ciclo Inicial) e intervenir a través de un psicólogo infantil, intensificando de forma individual dicho aprendizaje. Lo más importante será establecer la causa para poder intervenir de la forma más adecuada y rápida para que no se complique el problema con los siguientes aprendizajes escolares.

Transtornos del aprendizaje.



Se engloban bajo el nombre de "trastornos del aprendizaje" gran variedad de trastornos, cuyas causas son muy diversas. Habría que restringir la definición a aquellos trastornos, bajo los que siempre se detecta un nivel de aprendizaje inferior a lo que se considera "normal" para la edad del niño, siempre y cuando ello no se deba:

- a retraso mental

- ni a ningún otro trastorno del desarrollo

Para poder abordar de forma adecuada una situación así, el especialista infantil deberá hacer la valoración del problema desde varias perspectivas:

- desde el nivel madurativo del niño (su lateralidad, su psicomotricidad general, la organización de su esquema corporal,...)

- desde su estado neurológico (valorar si es preciso realizar algún tipo de prueba neurológica).

- desde su nivel de inteligencia y los factores que influyen en ésta.

- desde la situación o nivel psicopedagógico (en las diferentes áreas y habilidades,...)

- desde su personalidad (desde el punto de vista de los padres, así como de los profesores).

Niños en situaciones especiales: Niño agresivo.



Las primeras conductas consideradas realmente como agresivas aparecen entre el 2º y 3er año de vida cuando se siente frustrado por no ver cumplidos sus deseos; entonces, el niño araña, muerde, pega,...

Antes de esta edad, lo que muestra el niño es rabia, mediante pataletas y gritos.

Es a partir de los 4 años, cuando esta agresividad pasa a ser expresada verbalmente.

Esto ocurre en el desarrollo normal de todo niño. Lo que sucede es que algunos continúan mostrándose agresivos, y esto sí que se convierte en una conducta problemática. El grado de agresividad, la edad de aparición, así como su permanencia en el tiempo hará determinar la intervención de un psicólogo infantil que abarque el problema desde su globalidad.

Generalmente, tras este comportamiento hay una baja autoestima, un ser que lucha por autoafirmarse y/o la expresión de un exceso de tensión o angustia que no encuentra otra vía de escape. Para unos, la agresión es una forma de dominar al grupo y para otros es imitar lo que han visto o vivido en casa,...

Para lograr algún cambio en dicho comportamiento, habrá que incidir directamente sobre las causas que lo originan, además de educarle en el control de sí mismo.

Al hablar de agresividad nos referimos tanto a la agresividad física como a la verbal, y tanto a la autoagresividad como a la agresividad contra los demás. Tanto el comportamiento autodestructivo como el de agresividad contra los demás pueden llegar a resultar muy peligrosos; de ahí, que no deben ignorarse, ni se puede esperar a que se resuelvan por sí solos.
AGRESIVIDAD CONTRA LOS DEMAS

Cuando un niño se muestra una conducta agresiva contra los demás, se le apartará del grupo, provocando en él una reflexión, sin reñirle ni culparle, y haciendo que continúe su juego sólo hasta que decida volver a integrarse al grupo con otra actitud más adecuada.

Encontramos en este grupo también a los niños que:

- juegan continuamente con fuego

- dañan a los animales .

Son casos que requieren una rápida intervención, pues están poniendo en peligro su propia vida y la de los demás.
AUTOAGRESIVIDAD (Suicidio, Autolesionarse,...)

- El suicidio es algo poco frecuente en niños menores de 10 años; lo es más en las edades cercanas a la adolescencia.

Signos preocupantes son:

- el mostrarse "especialmente triste"

- perder interés por las cosas que le rodean

- perder el apetito

- alteraciones del sueño (en exceso o en defecto)

- decir cosas negativas sobre sí mismo

- .....

Estos datos deben alertarnos, y hacen necesario buscar las causas (hablando con el propio niño).

La mayoría de los casos requerirán un trabajo más profundo por parte de un especialista infantil, e intervenir de forma rápida mediante un tratamiento.

Niños en situaciones especiales: El niño que roba.



El robo también suele producirse como resultado de un sentimiento de frustración.

Cuando el niño se inicia en esta conducta, fácilmente la convierte en un hábito, pasando de pequeños hurtos en casa a robos cada vez mayores.

Algunas de las causas por las que un niño, al que no le falta nada, roba son:

- por impulso, actúa sin reflexionar: desea un objeto y su egocentrismo no le deja darse cuenta de que deja a otra persona sin ese objeto.

- por culpabilidad (para que le castiguen)

- para tomar protagonismo ante compañeros,...

- para compensar el sentimiento que tiene de carencia afectiva o de abandono

- por agresividad, únicamente para perjudicar al dueño de aquel objeto, aunque despúes dicho objeto sea destruido o regalado.

En cuanto se observen indicios de esta conducta, los padres deben actuar, no deben dejar lo sucedido en algo ignorado. No debe culpabilizarse al niño: "malo" no es el niño, sino la acción de robar que ha realizado. Se hablará sobre lo sucedido, sobre cómo poder reparar el daño realizado y, si es posible, pedir disculpas a la persona afectada.

Según la gravedad o la persistencia de esta conducta se hará precisa la intervención de un psicólogo infantil

Niños en situaciones especiales: Niño que miente.



El niño suele mentir como resultado de un sentimiento de frustración.

Hasta los 4 años, el niño suele comportarse con el fin de complacer a los padres; de ahí, que el realizar algo que se sabe no va a gustar, se omite, no se cuenta.

Es alrededor de los 6-7 años, cuando el niño ya tiene conciencia de haber mentido y se siente mal por ello, aunque no se le haya descubierto.

Razones por las que un niño suele mentir:

- por imitar a los adultos: El niño se da cuenta que los adultos mienten cuando les interesa:

- para complacer a alguien

- para no hacerle daño,... Para el niño esto se va a ir convirtiendo en algo natural, que cree poder utilizar a su conveniencia tal y como ha observado en los demás.

- por predisposición en su personalidad: encontraremos diferentes reacciones según el carácter del niño. Si es tímido o si es un niño con muchos miedos, lo que hará será negar las cosas. El niño exaltado, las exagerará. Precisarán diferente trabajo terapéutico:

- al niño tímido se le estimulará más, se hablará con él para que al "conocer" esas cosas que le producen tanto miedo se sienta con más dominio sobre ellas.

- al niño exaltado se le intentará relajar mediante ejercicios de descarga psicomotriz o mediante alguna actividad deportiva; y se atenderá con detalle a sus fantasías, haciéndole ver que no son más que eso o que sólo una parte de éstas se ajustan verdaderamente al mundo real.

- para llamar la atención, pues se siente poco atendido: la mentira más frecuente suele ser el inventar una dolencia (se trata de algo diferente a los trastornos psicosomáticos, pues aquí el niño en realidad no sufre enfermedad alguna). Los padres deberán intentar dar al niño el afecto que reclama y dedicarle más tiempo.

- para evitar un castigo: la mayoría de las mentiras vienen producidas por este miedo. Suele responder a unos padres demasiado rígidos y moralizadores, y a un hijo con miedo de perder el amor de éstos. Es conveniente averiguar qué imagen tienen estos hijos de los padres, pues a veces es muy distinta de la que creemos.

- por vanidad o "chulería": generalmente se produce porque el niño quiere agradar a los padres, sabiendo cuánto valoran éstos las apariencias.

- por no tener la capacidad de distinguir entre lo real y lo imaginario: este caso precisa de psicoterapia, ya que este tipo de niños no tienen conciencia de que están mintiendo; significa que está anclado en fases anteriores de su desarrollo o que está perdiendo contacto con la realidad.

De acuerdo a las capacidades evolutivas del niño, es conveniente buscar la manera de enseñarle sobre la honestidad, a identificar lo real de lo imaginado,... y sobre todo, intentar ser un buen ejemplo.

Se felicitará siempre la veracidad de lo explicado, y una vez el niño miente , antes que reñirle, es necesario averiguar los motivos que le han llevado a mentir.

Niños en situaciones especiales: Niño hiperactivo.



Comencemos por definir lo que es la hiperactividad o lo que es más exacto de qué hablamos cuando se diagnostica a un niño de déficit de atención con hiperactividad. Para que nos entendamos, esto quiere decir que es un niño muy inquieto y al que le falta la atención de una forma muy llamativa.

La hiperactividad de los niños es considerada como normal, cuando se produce dentro de una etapa de la vida infantil alrededor de los dos o tres años. El que un niño sea inquieto no tiene nada que ver con la sintomatología que hoy vamos a abordar en esta información. La falta de atención y la inquietud constante en el niño son síntomas que, por lo general, los padres comentan primero al médico de atención primaria, con frecuencia alertados por los profesores y educadores.

Este trastorno ha recibido muchos nombres en el pasado, daño o disfunción cerebral mínima, hiperkinesia, hiperactividad y déficit de atención…. Pero en realidad todo ello engloba una alteración importante de la atención que, muy a menudo, se da con una extrema actividad en el niño…El porcentaje de niños con este problema se estima entre el 3 y el 5%, entre los niños en edad escolar, siendo seis veces más frecuente en los varones.


TRASTORNOS ASOCIADOS

Además, aproximadamente, el 40% de los niños con este trastorno tienen dificultades en el aprendizaje, lo que motiva, si no es tratado adecuadamente, el abandono de los estudios en la adolescencia. Y casi el 50% de estos niños tienen asociada alguna alteración psiquiátrica, sobretodo problemas de ansiedad, con rabietas y miedos o depresión y baja autoestima, en un 20% de los casos, también trastorno de oposición en un 25% y todo tipo de trastornos de conducta. La baja autoestima, está presente al menos en un 25%. Presentan también mayor riesgo de presentar conductas antisociales en la adolescencia, especialmente si se da en familias de riesgo ( abuso de drogas, alcoholismo, violencia).

Aunque la sintomatología mejora notablemente con la edad, los síntomas pueden persistir en la edad adulta, hasta en un 40 a 60% de los casos.



¿CUÁL ES LA CAUSA DE ESTE TRASTORNO?

Existen factores biológicos y genéticos. Entre los no genéticos podemos hablar de complicaciones prenatales, perinatales y postnatales.

Se sabe que predispone a padecer el trastorno el consumo materno de alcohol y drogas, incluso de tabaco... también influye el bajo peso al nacer, la anoxia, lesiones cerebrales, etc... Los factores ambientales pueden contribuir a su desarrollo aunque no hablaríamos en este caso de etiología pura. Las psicopatologías paternas, el bajo nivel económico, la marginalidad, el estrés familiar, en fin, un entorno inestable podría agravar el trastorno.

Por otra parte desde el punto de vista genético, todos los estudios inciden en que la existencia del mismo trastorno en hermanos es de un 17 a un 41%. En cuanto a gemelos univitelinos el porcentaje de trastorno común es hasta del 80%. Si el padre o la madre ha padecido el síndrome sus hijos tienen un riesgo del 44% de heredarlo.

Parece que existe una disfunción del lóbulo frontal y por otra parte desde el punto de vista neuroquímico existe una deficiencia en la producción de importantes neurotransmisores cerebrales. Los neurotransmisores son sustancias químicas que producen las neuronas, es decir las células nerviosas. Para que se produzca una buena comunicación entre las neuronas y todo funcione normalmente debe existir la cantidad adecuada de determinados neurotransmisores que en este caso son la dopamina y la noradrenalina. En el niño con TDAH existe una producción irregular en estos dos neurotransmisores y, por ello, la medicación que se les da y de la que hablaremos más adelante, está orientada a regularizar la producción de esas sustancias...


¿CUÁLES SON LOS SÍNTOMAS? ¿CÓMO RECONOCERLOS?

¿ Cómo podemos saber si nuestro hijo es simplemente nervioso o presenta un trastorno de déficit de atención? ¿ Se puede curar?

Empezaremos por ponerle un nombre que es el que se utiliza en la actualidad. Se le denomina, trastorno por déficit de atención con hiperactividad aunque también existen tipos de trastornos de atención sin que se evidencie un exceso de actividad.

Antes de enumerar los síntomas, tal y como han sido descritos por la sociedad americana de psiquiatría, para considerar el trastorno como tal, hablaremos de cómo son estos niños para sus padres: en principio y como regla general, son niños cuyas madres siempre suelen estar, como aquella película “ al borde del ataque de nervios”. Son niños que desde que nacen están dando la lata, no duermen bien o lloran, o son espabiladísimos y enseguida se levantaban de la cuna… parecen muy inteligentes porque suelen hablar mucho y con desparpajo, y aparentemente su desarrollo ha sido normal…. Simplemente es un niño insufrible al que no podemos llevar a ningún lado, agota a todo el mundo, desquicia a la familia y no para quieto ni un minuto.

Cuando empieza la etapa escolar comienzan los fracasos. Los maestros se percatan de que no presta la más mínima atención, hasta el punto de que a veces son enviados al otorrino para realizar una audiometría porque parece estar “ sordo”.

Pasamos ahora a enumerar los síntomas que deben darse, como mínimo 6 de ellos, y que están enumerados en el Manual diagnóstico y estadístico de trastornos mentales de la sociedad americana de psiquiatría: DSM IV.

Síntomas de desatención

A menudo no presta atención a los detalles, tiene errores por descuido y el trabajo escolar suele ser sucio y desordenado.
Tiene dificultades para mantener la atención, incluso en los juegos.
A menudo, parece no escuchar cuando se le habla directamente, parece tener la mente en otro lugar o como si no oyera.
No finaliza tareas escolares, pasa de una actividad a otra sin terminar la anterior. No sigue instrucciones ni órdenes.
Dificultad para organizar tareas y actividades.
Evitan situaciones que exigen una dedicación personal y concentración ( por ejemplo, tareas de papel y lápiz)
A menudo extravía objetos necesarios para tareas o actividades ( por ejemplo, ejercicios escolares, juguetes, lápices, libros, etc.) y suelen tratarlos sin cuidado.
Se distraen con facilidad ante estímulos irrelevantes, pueden dejar las tareas que están haciendo para atender ruidos o hechos triviales que son ignorados por los demás (una conversación lejana, el ruido de un coche,...)
Son olvidadizos en sus tareas cotidianas ( olvidan el bocadillo, los deberes, la hora del partido, etc.)
Bien hemos visto los criterios que se consideran para tener un grave problema de atención, veamos ahora los síntomas de la hiperactividad e impulsividad que coexiste con la falta de atención la mayor parte de las veces.

Síntomas de hiperactividad

Suele mover en exceso manos y pies y se retuerce en su asiento.
A menudo abandona su asiento en clase o no es capaz de estar sentado cuando debe.
Corre o salta en situaciones en las que resulta inadecuado hacerlo.
Experimenta dificultades para jugar tranquilamente o dedicarse a actividades de ocio.
Parece estar siempre en marcha, como si tuviera un “ motor”.
A menudo habla excesivamente.
Dan respuestas precipitadas, antes de que las preguntas se acaben de formular.
Puede tener dificultades para aguardar su turno en cualquier situación.
También suele entrometerse o entorpecer los asuntos de los demás, tocan cosas que no deben, hacen payasadas…
Según el DSM IV existen varios subtipos de TDAH, según predomine la desatención o la hiperactividad:
· Tipo predominantemente COMBINADO: Cumple los criterios de atención y de hiperactividad.
· Tipo predominantemente HIPERACTIVO: Cumple los criterios de hiperactividad pero no llega a los necesarios de falta de atención.
· Tipo predominantemente DE ATENCIÓN: Cumple al menos seis de los criterios de déficit de atención, pero no los de hiperactividad.

El más común es el combinado y, en las niñas, parece predominar el de inatención.

En los tipos combinados, la hiperactividad e impulsividad hacen que, con bastante frecuencia, sufran accidentes, puesto que no son capaces de calibrar los peligros de sus acciones.. (cruzar en rojo, patinar en terrenos no adecuados, lanzarse con la bici por una cuesta muy empinada, etc..)

Esta falta de atención y exceso de actividad suelen producir también problemas graves en el aprendizaje, aunque su capacidad intelectual sea normal o superior, y precisamente ese fracaso escolar, suele ser el principal motivo por el que acuden a consulta.

Veamos ahora algunos de los síntomas que presentan en la evaluación de su aprendizaje.

Síntomas de dificultades de aprendizaje

Variabilidad. Son niños que tienen amplias variaciones en sus respuestas, son los típicos niños de los que se dice “puede hacerlo porque ayer realizó perfectamente esa tarea, cuando hoy es un desastre”.
Retraso psicomotor, que varía desde la simple torpeza motriz hasta “ dispraxias “ importantes, es decir problemas en las nociones de su esquema corporal, del tiempo y del espacio. Dificultades que se agudizan cuando tiene que realizar algo con ritmo.
Trastorno del lenguaje de tipo expresivo, con vocabulario limitado y dificultades a la hora de expresarse. Problemas en el área de lectura. Dislexia.
Dificultades en la grafía, en la escritura: disgrafía y disortografía, porque existe una deficiente coordinación entre lo que ve y el movimiento manual, es decir, suelen presentar incordinacion visomotriz . Su escritura es torpe, con tachones, desordenada, su ortografía con múltiples faltas y confusiones...

Es evidente que, con todos estos trastornos, son niños que también presentan problemas emocionales. No es raro que tengan un comportamiento social indiscreto, sin freno, y molesto. Este descontrol, casi constante, genera desconfianza e irritación en padres y maestros, así como rechazo de los hermanos y compañeros… lo que hace que pueda ser un niño aislado.

Veamos ahora las características personales que presenta y que pueden ayudarnos a seguir clarificando este síndrome…

Síntomas personales

Emotividad muy variable, cambian frecuentemente de humor, pueden pasar de la risa al llanto con cierta facilidad.. son explosivos, de rabietas constantes.
Acentuados sentimientos de frustración, baja tolerancia ante los problemas. Insiste una y otra vez en que se realicen sus peticiones.
Problemas de relación con los compañeros. Desadaptación social.
Problemas de ansiedad, agresividad, oposición, disconformidad…
Algunos de ellos presentan enuresis ( pis nocturno).
Bien, una vez descritas las características que pueden presentar, aunque evidentemente no todos los niños tienen todas las alteraciones, se puede comprender perfectamente que sean niños que suelen ser el punto central de las discusiones familiares, puesto que son niños que “desquician“ fácilmente y no siempre se sabe como tratarlos, por lo que se producen constantes enfrentamientos en la familia.

La falta de atención que pone en tareas que requieren un esfuerzo suele interpretarse como pereza y además en ocasiones podemos encontrarnos con niños que tienen el trastorno, pero que son capaces de estar sin síntomas en una situación nueva, cuando existe mucho control, o ante actividades muy interesantes (como los videojuegos), lo que hace que sus padres piensen que el comportamiento anómalo es voluntario, “que para lo que le interesa sí que se fija” y esto complica aún más el problema. Estos padres no saben que existe una importante deficiencia del autocontrol, que tiene base neurobiológica, como ya hemos visto anteriormente.

Hay pues que armarse de paciencia y saber que el trastorno, que es acusadísimo en la primera parte de la infancia, suele ir mejorando con la edad, aunque existen aún alteraciones en la vida adulta, casi en una tercera parte de los casos.

Como ya hemos dicho, en la población infantil aproximadamente cinco de cada cien niños presentan este trastorno, aunque desgraciadamente la mayoría no son diagnosticados, y por ello se les trata como niños torpes, maleducados, consentidos, o simplemente caracteriales. Se les clasifica como niños con problemas de conducta , cuando en realidad son niños que necesitan un tratamiento especial y, sobretodo y principalmente, un diagnóstico adecuado que arroje a padres y profesores una luz para que estos niños se sientan menos culpables de su falta de control…

¿Quiénes deben realizar el diagnóstico y cómo tratarlo? En principio, el diagnóstico y el tratamiento deben ser multidisciplinar. El examen de un psicólogo, y de un psiquiatra o neurólogo es imprescindible, porque las áreas que estos profesionales abarcan son básicas para reeducar un síndrome de déficit de atención con hiperactividad.

TRATAMIENTOS

A) Farmacológico:

El tratamiento pues, puede ser farmacológico, como hemos visto antes y de orientación psicológica, con la finalidad de conseguir una reducción de la hiperactividad y un tratamiento adecuado para modificar las conductas impulsivas e incrementar la atención. El tratamiento farmacológico que debe prescribir un neurólogo o psiquiatra y que se está utilizando para estos niños es el metilfenidato ( el famoso Rubifén o Ritalín), la dextroanfetamina ( Dexedrina ) y la pemolina magnésica como (Cylert) pero estos dos últimos no están disponible en España. Todos estos medicamentos facilitan la acción de la dopamina y de la noradrenalina ( los dos neurotransmisores implicados en el trastorno) y por ello actúan de inmediato.

Hablaremos pues del metilfenidato: Los efectos del Rubifén, son inmediatos y empiezan a notarse a los 30 o 60 minutos tras la ingesta y comienza a disminuir unas 3 a 6 horas después de haber tomado la pastilla. Quiere esto decir que se requiere la administración continuada del medicamento con las pautas que establezca su terapeuta. No es aconsejable medicar a un niño menor de seis años, aunque se han tratado niños de tres años cuya sintomatología era muy grave y el beneficio de la terapia farmacológica era imprescindible.

Se ha hablado mucho de este tipo de tratamiento y digamos que en España, y más concretamente en Asturias, siguen existiendo reticencias por parte de muchos profesionales para recetar los fármacos, que desde luego no son la panacea del tratamiento pero que nos facilitan la tarea cuando tenemos que seguir una reeducación y un tratamiento psicológico con estos niños.

Se insiste mucho en los efectos secundarios y la posible adicción a la medicación. Bien pasemos a describir los que ocasiona el metilfenidato:

Insomnio, cuando la dosis se da demasiado tarde.
Puede haber pérdida de apetito.
En ocasiones puede ocasionar dolores de cabeza.
Molestias gástricas.
Estos dos últimos más leves.

La medicación se debe dar en pautas de dos o tres veces al día, dependiendo de la respuesta del niño a la medicación que deberán evaluar en un seguimiento semanal, los padres, profesores y el terapeuta. Normalmente el esquema de medicación es de 8 mañana, 11 de la mañana y antes de comer a las 14 o 15. Se establece la dosis óptima que se mantiene todos los días de colegio en el caso de que no presente problemas de conducta importantes en casa, y si no también deben darse los fines de semana, tratando de dar la medicación discontinua, cesando durante las vacaciones escolares. Por otra parte está demostrado que esta clase de medicamentos no crean adicción física siguiendo las orientaciones del médico, como sucede con otras muchos fármacos.

Cerca de un 20% de los niños pueden dejar la medicación al cabo de un año, puesto que además se supone que se ha trabajado con ellos desde el plano psicológico.

B) Tratamento psicopedagógico

Tiene tres grandes frentes, que deben conocerse perfectamente para poder trabajar sobre las diferentes áreas y conductas.

FAMILIA - PROFESOR - TERAPEUTA

Veamos las pautas que un niño con TDHA necesita en la familia.

Pautas FAMILIARES para un niño con TDHA

La familia deberá :

Tener normas claras y bien definidas.
Dar órdenes cortas y de una en una.
Propiciar un ambiente ordenado y muy organizado, sereno y sin gritos.
Reconocer el esfuerzo realizado por el niño. Aumentar su autoestima.
Evitar ser superprotectora y no dejarse manipular por sus caprichos.
Cumplir siempre los castigos y las recompensas ante sus acciones.
Darle pequeñas responsabilidades.
Aceptarle tal y como es.
Saber que el trabajo es mucho y que se necesita mucha constancia.
Fomentar sus puntos fuertes, sus facultades.
Pautas ESCOLARES para un niño con TDHA

El profesor deberá :

Ser un profesor que comprenda y asimile el trastorno del niño, que se informe sobre él.
Sentarle en el lugar adecuado, lejos de estímulos, enfrente de él, entre niños tranquilos.
Darle órdenes simples y breves. Establecer contacto visual con el niño.
Darle encargos una vez que haya realizado el anterior, no dejar que deje las cosas a medio hacer.
No se le puede exigir todo a la vez, se debe desmenuzar la conducta a modificar en pequeños pasos y reforzar cada uno de ellos: si comienza por acabar las tareas, se le felicita para conseguirlo, luego que lo intente con buena letra y se valorará, más tarde que el contenido sea también correcto. Pedirle todo a la vez, le desmotivará porque no puede realizarlo.
Alternar el trabajo de pupitre con otras actividades que le permitan levantarse y moverse un poco.
Enseñarle y obligarle a mantener el orden en su mesa.
Hacer concesiones especiales, darle más tiempo en los exámenes, indicarle cuando se está equivocando por un descuido, o facilitarles un examen oral de vez en cuando para que descanse de la escritura, etc.
Darle ánimos continuamente, una palmada en el hombro, una sonrisa ante cualquier esfuerzo que presenta, por pequeño que sea. Premiar las conductas positivas es imprescindible, haber atendido, levantar la mano en clase, intentar buena letra, o contestar sin equivocarse son conductas a reforzar en el niño hiperactivo, dicho refuerzo puede ser con privilegios de clase ( borrar la pizarra, repartir el material, hacer recados, lo que además le permite moverse que es lo que necesita), o bien dedicarle una atención especial, reconocimiento o halago público: comentarios positivos en alto, o en privado a otro profesor para que lo oiga el niño, notas para casa destacando aspectos positivos, una felicitación de la clase, un trabajo en el corcho, etc...
Evitar humillarle o contestarle en los mismos términos. Evitar insistir siempre sobre todo lo que hace mal.
Tener entrevistas frecuentes con los padres para seguir su evolución.
Pautas TERAPEÚTICAS para un niño con TDHA

El terapeuta deberá:

Orientar a los padres acerca del trastorno que padece su hijo.
Darles pautas de conducta y actuación con su hijo.
Reeducar las dificultades de aprendizaje asociadas ( dislexias, falta de memoria, discalculalias, disgrafías, etc)
Entrenarle en la resolución de problemas..
Entrenarle en habilidades sociales puesto que suele presentar problemas con los demás.
Entrenarle en técnicas de relajación...
En general estos niños solo necesitan que seamos conscientes de sus dificultades, de sus limitaciones, que sepamos, ya que el déficit de atención con hiperactividad es una entidad propia, con la sintomatología que acabamos de describir y, sobre la que aún, se están publicando contínuos estudios, puesto que aún nos queda mucho por descubrir acerca de sus bases biológicas, la influencia del entorno y las posibilidades terapéuticas, pero creo que lo fundamental es que se reconozca el síndrome como tal.

Las familias que suelen estar desorientadas al principio, deben observar sin alarmismos innecesarios el comportamiento de su hijo, si les preocupa realmente, y realizar un diagnóstico precoz que facilitará el tratamiento posterior. Para ello, existe una asociación de reciente creación que puede orientar y poner en contacto a las distintas familias que de esta forma se sienten más comprendidas y escuchadas y desde luego, menos solas...


BIBLIOGRAFIA RECOMENDADA:

Como vivir con un niño hiperactivo. C.Avila y A. Polaino – Lorente, Ed: Narcea.
Déficit de atención con hiperactividad. Isabel Orjales Villar, Ed: CEPE.
El niño muy movido o despistado. Christopher Green. Kit Chee, Ed: Medici.
Trastorno por déficit de atención con hiperactividad. Una guía práctica. Ana Miranda Casas, Ed. Aljibe.

Niños en situaciones especiales: Padres separados.



Dado el elevado número de separaciones entre parejas que se producen hoy en día, son muchos los niños afectados por esta situación. Esta situación ha dejado de ser excepcional para pasar a ser bastante habitual.

Además del shock emocional para los padres que supone una ruptura sentimental, éstos cargan con el miedo de cómo toda esa Las consecuencias que sufre el hijo de padres separados estará más relacionado:
- con las desaveniencias familiares previas y asociadas a la separación
- y con el papel que hacen jugar al niño en la separación
más que con la propia separación.
Esto, junto con la edad y la madurez del propio niño condicionarán la forma cómo esta separación influirá en su desarrollo.

Veamos varios apartados:

Posibles reacciones en el niño

Como influye la edad y madurez del niño

Mensajes clave para recordar al niño

Mensajes clave para los padres
POSIBLES REACCIONES DEL NIÑO

- Reacción de ansiedad, e incluso angustia, durante el conflicto y tras la separación de los padres. Suelen sentir miedo.

- Lloran a menudo y esto les tranquiliza. Hay que acompañarles en ese momento, y favorecer esa expresión del dolor que sienten.

- Insisten una y otra vez en el deseo de que los padres vuelvan a estar juntos. Hasta que no aceptan que esto no es posible, se muestran muy tristes e infelices. Acabarán aceptando que esto no es más que una fantasía.

- Algunos se acuerdan del otro progenitor, cuando el que está con ellos les regaña; y desean tanto estar con el otro, que incluso pueden llegar a pensar en escaparse de casa. Llegan a idealizar más al otro progenitor, al ausente, pues sólo recuerda los buenos ratos pasados con éste.

- Probablemente, aparezcan trastornos en el sueño y en la alimentación


COMO INFLUYE LA EDAD Y MADUREZ DEL NIÑO

- Cuanto más pequeño es el niño, dispone de menos mecanismos para elaborar lo que está pasando. En consecuencia ,suelen aparecer manifestaciones de ello a través del cuerpo: molestias abdominales, vómitos, dolores de cabeza,...

- Cuando el niño es algo mayor puede sentirse la causa de dicha separación y, por tanto, sentir gran culpabilidad. Suelen aparecer depresiones con fases más agresivas, repercusiones en el rendimiento escolar, regresiones a edades anteriores (vuelven a surgir comportamientos anteriores, de más pequeños,...),...

- En niños ya más mayores, suele desarrollarse una hipermadurez en parte positiva, pero a la vez peligrosa que pretende sustituir al progenitor ausente.

MENSAJES CLAVES PARA RECORDAR AL NIÑO

- La decisión de separarse es exclusivamente de los padres. Ellos han tomado esta decisión porque creen que es lo mejor para todos los componentes de la familia. Los hijos no han tenido nada que ver en esta decisión.

- Los padres no se han separado porque el niño se haya portado mal, pues otras veces lo ha hecho y no ha ocurrido así.

- Resaltar al niño cuántas personas se preocupan por él (abuelos, amigos, profesores,...) y desean que sea feliz. Por tanto, ha de borrar ese miedo que siente a ser abandonado, a quedarse sólo. Cuenta con el cariño de más personas.

- Seguirá disponiendo de ambos padres, en todos los aspectos que él precise, aunque ya no vivan juntos.

- Siempre que le preocupe algo o se sienta mal, podrá hablar con los padres; ello le hará sentirse mejor.

- Aunque los padres se hayan separado, el niño puede igualmente amar y ser amado; no tiene por qué repetirse esa situación siempre.

- Los padres demuestran su amor de muy diversas maneras. Pero puedes sentir que tus padres te siguen queriendo si intentan estar contigo todo el tiempo que pueden, si te ayudan cuando lo necesitas y si te escuchan.


MENSAJES CLAVES PARA LOS PADRES

- No caer en la sobreprotección del hijo por pena; se le ha de seguir tratando como a un niño "normal" de su edad. Si no "no le ayudaremos a crecer", acabará comportándose de forma inmadura y más infantil de lo que le corresponde.

- Todas las personas tienen virtudes y defectos; también los padres. Hablar con el niño del otro progenitor con argumentos reales, sin caer en la ficción.

- Es preferible que, los días de encuentro, no se llenen excesivamente con actividades, pues si se ocupa el tiempo en hacer demasiadas cosas, no hay tiempo para charlar, comunicarse,...

- Los puntos más conflictivos de los padres tras la separación suelen ser: los hijos, el dinero y las nuevas relaciones. Intente ser objetivo y no intentar poner al hijo de su parte. Hay que intentar solucionar estas cuestiones, sin involucrar a los hijos.

- Es preferible para los niños, que vuelva a constituirse una familia compuesta por hombre y mujer, aunque uno de ellos no sea el verdadero progenitor; ello reparará los vínculos dañados, aunque requerirá tiempo la aceptación de esa nueva situación por parte de todos.situación repercutirá en sus hijos.